Las pruebas de estanqueidad son un servicio que ofrecen empresas especializadas para certificar la estanqueidad de una instalación concreta. Suelen solicitarlas las empresas de construcción antes de proceder a la entrega de una obra nueva.

¿En qué consisten las pruebas de estanqueidad?

No se trata de un trámite obligatorio, aunque cada vez son más las empresas que presentan este tipo de certificados de nuevas instalaciones como parte del control de calidad que siguen. Su objetivo principal es comprobar el estado estanco del sistema de red, garantizando que está bien sellado y que no permite las fugas de agua.

Estas pruebas de estanqueidad se llevan a cabo a partir de las instrucciones técnicas contempladas en la normativa UNE-EN 1610 basada en la “Instalación y pruebas de acometidas y redes de saneamiento” y siempre deben realizarse por una empresa especializada.

Las pruebas de estanqueidad en tuberías

Deben realizarse antes de proceder al cerramiento de la zanja. De ese modo, detectaremos cualquier anomalía y evitaremos cualquier incidencia o avería grave. Una de las infraestructuras más complejas de cualquier ciudad es su red de saneamiento, de ahí que sea fundamental hacer una prueba de estanqueidad en las tuberías.

Este proceso se lleva a cabo tanto en las tuberías de red de saneamiento como en las de agua potable o en las interiores de agua a presión que se encuentran en los edificios. Así, detectaremos cualquier fuga o filtración de agua en la instalación por mínima que sea.

prueba estanqueidad 1 - Qué son y de qué tratan las pruebas de estanqueidad

¿Cómo se realizan?

Este método consiste en introducir agua o aire en la tubería, objeto de comprobación, y analizar posteriormente si existe una caída de la presión durante un tiempo. Para tenerlo más claro, los pasos a seguir son los siguientes:

  1. En primer lugar deben colocarse herramientas llamadas obturadores que sirven para bloquear ambos extremos del conducto que queremos comprobar.
  2. A continuación se introduce agua o aire a cierta presión a través de uno de estos obturadores.
  3. Después se debe monitorizar el proceso para determinar la rapidez con la que cae la presión en un período de tiempo determinado.
  4. Los resultados determinarán si la red o instalación posee una estanqueidad adecuada para un correcto funcionamiento siguiendo la regulación actual.

Para realizar las pruebas de estanqueidad se necesitan varios equipos especializados y el empleo de uno de los sistemas recogidos en la normativa UNE-EN 1610: método con agua o con aire.

Escoger uno u otro dependerá básicamente de las características de la tubería y de dónde esté situada. De cualquier forma, es recomendable utilizar el método con aire y, si no obtenemos resultados, intentarlo después con agua.

prueba estanqueidad 2 - Qué son y de qué tratan las pruebas de estanqueidad

¿Qué necesitamos para realizar las pruebas de estanqueidad?

Si no queremos hacer ninguna obra, necesitamos hacer uso de la tecnología y disponer de algunos elementos importantes como obturadores o balones especiales, medidores de nivel, manómetros de presión, válvulas de seguridad, purgadores, hinchadores y mangueras de inflado y llenado, entre otros.

Si no contamos con este tipo de material y no poseemos los conocimientos necesarios, los resultados de estas pruebas serían cuestionables. Una vez transcurra el tiempo que determina la normativa, si no se han notado pérdidas de presión, la tubería será aprobada. Si por el contrario se ha producido una bajada de presión, tendremos que detectar la filtración para repararla.